1960
una noche
en la ópera
En 1959, Alfredo Kraus interpretaba 'Rigoletto' con gran éxito en el Victoria Eugenia. Nadie sabía entonces que la ópera iba a sufrir una serie de altibajos, después de haber estado siempre presente en este teatro desde sus inicios.
Por un lado, los cachés de las orquestas y artistas se habían disparado al finalizar la II Guerra Mundial y, por otro, el Gobierno Italiano retiraba las subvenciones a la ópera. En estas condiciones, la Quincena Musical de 1960 no pudo celebrarse. La ópera regresó fugazmente los dos años siguientes, pero volvió a desaparecer casi una década, siendo sustituida en parte por recitales y conciertos sinfónico corales, y en parte por grandes producciones teatrales.
A pesar de no ser buenos tiempos para la lírica, el goteo de grandes intérpretes durante aquellos años fue notable: junto a Victoria de los Ángeles y Alfredo Kraus, se presentan Teresa Berganza, Montserrat Caballé, José Carreras o Jessye Norman, que estaban iniciando sus carreras cuando llegaron por primera vez al Victoria Eugenia.
En 1969 volvieron las ayudas económicas, pero el espejismo duró poco. En 1972 la ópera se representa por última vez hasta mediados de los años 80. Eso sí, se despide a lo grande con 'La Bohéme', interpretada por Luciano Pavarotti en su única actuación en San Sebastián.
Por cierto, en aquel 1960 sin Quincena, Alfredo Kraus volvió al Victoria Eugenia, aunque esta vez para rodar unas escenas ambientadas en el Festival de Cine para la película 'El vagabundo y la estrella'.
Conciertos sinfónico corales
Entre los grandes eventos que sustituyeron a la ópera, cabe destacar 'La Atlántida', cantata escénica con texto en catalán de Jacinto Verdaguer, que dejó inconclusa Manuel de Falla y terminó Ernesto Halffter. Se programó en 1962 bajo la dirección de Rafael Frühbeck de Burgos y la interpretación de Victoria de los Ángeles y la Orquesta Nacional con el Orfeón Donostiarra. Asistieron Franco y todo su séquito.
Grandes producciones teatrales
El Victoria Eugenia también vivió una edad de oro en la programación teatral. Los 50 y 60 son los años de autores y directores como Miguel Mihura, José López Rubio, Luis Escobar, Alejandro Casona, Edgar Neville, José Tamayo, José Luis Alonso o Adolfo Marsillach. Y de grandes actores que pisaron estas tablas innumerables veces: Amparo Rivelles, José María Rodero, Aurora Redondo...